España está a punto de ser una pionera en cuestión de genética animal, pues ha abierto las puertas a una técnica que permitiría que los perros no crecieran y se mantuvieran en cachorros de por vida, ayudando así a los problemas de espacio que hace que  muchos de estos sean abandonados en las carreteras durante los meses de verano.

Si esto se convierte en realidad, la sociedad científica española estaría de enhorabuena, pues tras meses de luchas con el Gobierno por mejorar sus condiciones y por las pocas ayudas que se les han otorgado, han conseguido un gran proyecto que podría extenderse a nivel mundial y cambiar así la vida de muchos de perros que acaban sacrificados en perreras.

Primer perro modificado genéticamente

Kyword es el nombre del primer perro que ha experimentado la técnica desarrollada por los científicos e ingenieros españoles y si todo sale bien, será presentado a la sociedad en los próximos meses tras asegurarse de que no posee ninguna enfermedad y no corre ningún peligro.

Kyword, el primer perro modificado geneticamente

Los investigadores han modificado la estructura genética de Kyword de tal manera que introdujeron dos moléculas, que como explica Manuel Pérez Alonso, profesor de genética de la Universitat de Valéncia, tienen la facultad de inhibir la hormona de crecimiento, producida por un gran número de células que necesitan proliferar gracias a la existencia de un suero y moléculas adhesivas como la fibronectina, vitronectina y nutritivas como lipoproteínas, transferrina y nutrientes como los aminoácidos, iones y moléculas energéticas.

Tras el anuncio del primer perro modificado genéticamente, muchas personas se han hecho eco de la noticia con grandes expectativas, pues es una gran solución al abandono de perros, ya que están mucho más demandados los cachorros. Eso sí, el precio de la broma aumentaría considerablemente, pues no es lo mismo criar un perro con su desarrollo normal al de uno hecho genéticamente.